A vueltas con los tests falsos: Interpharma el intermediario

Leo ayer esto:

El Ministerio de Sanidad firmó un contrato de 17,1 millones de euros con la empresa Inter Pharma para la adquisición del célebre lote de test fallidos para detectar el coronavirus, fabricados por la empresa china Bioeasy Biotechnology. EL MUNDO ha tenido acceso en exclusiva a la documentación oficial, que revela al fin lo que costaron los casi 700.000 test inservibles para detectar de forma rápida el coronavirus. En esta documentación queda reflejada la exigencia de devolución por parte del Ejecutivo de 6.988.035 euros que ya había abonado.

Después de esto, me parece aún más incomprensible todo que cuando escribí la que es la primera entrada de este blog.

Si queremos a día de hoy saber cuáles son las actividades de Interpharma, no podemos consultar su web, porque, a día de hoy, no aparece:

Ese error ocurre cuando el servidor que aloja la página funciona mal o está caído:

"lo más común es que el servidor con el que intentas comunicarte está recibiendo un gran número de peticiones y está sobrepasado o caído en estos momentos. No puede funcionar con la rapidez adecuada y el navegador entrega al usuario el código de estado 504 Gateway Timeout".

Como no nos podemos informar en su web, se consultan varias webs de información empresarial. En la de "El Economista", nos enteramos de que su objeto social es:

No vamos muy bien: el objeto social, si vamos a la legislación mercantil:

"se puede definir como uno de los elementos esenciales del contrato de sociedad. El objeto social hace referencia a las actividades que la sociedad desarrolla o ha de desarrollar. Es el medio que utiliza la sociedad para conseguir su fin último, que normalmente es el de obtener un beneficio económico que repartir entre los socios. (...)

El objeto del contrato de la sociedad, como anteriormente se ha referido, viene constituido por la actividad o empresa para la que se constituye la sociedad. Dicho objeto ha de ser lícito y posible. Y ello por imperativo de los artículos 1271 y 1272 del Código Civil. Tales artículos establecen que pueden ser objeto del contrato todas las cosas que no estén fuera del comercio de los hombres, aún las futuras".

Es cierto que se han admitido actuaciones relativas a actividades fuera de las que se señalan en los estatutos, pero también que no se han entendido incluidas aquellas que las partes nunca quisieron incluir. Luego si en su objeto social no se han incluido la fabricación  de productos farmaceúticos o, más exactamente, fabricación de preparados para el diagnóstico médico, eso indica que, primero, es muy dudoso que esta empresa pudiera comercializar esos tests legalmente, al estar fuera de su objeto social y, segundo, incluso en el caso en que pudiera, normalmente no se dedicaría a ello.

Es cierto que su código CNAE es el 2120 en el que se deben incluir (página 9, nota al pie 7):

"La fabricación de especialidades farmacéuticas, por su parte, incluyen la fabricación de medicamentos: antisueros (sueros sanguíneos que contienen anticuerpos) y otras fracciones sanguíneas, vacunas, medicamentos diversos, incluidos los preparados homeopáticos, la fabricación de preparados químicos contraceptivos de uso externo y medicamentos contraceptivos a base de hormonas, la fabricación de preparados para el diagnóstico médico, incluidas las pruebas de embarazo la fabricación de sustancias radioactivas para el diagnóstico en vivo, la fabricación de productos farmacéuticos biotecnológicos. Esta clase comprende también: la fabricación de guatas, gasas, vendas, apósitos, etc. medicinales impregnados y la preparación de productos botánicos (trituración, cribado, molido) para uso farmacéutico".

Pero como vemos, los productos de parafarmacia (que sí menciona su objeto social) están incluidos dentro de los mencionados en esa categoría, por lo que podemos concluir que Interpharma no se dedica a la intermediación ni a la producción de los tests por los que intermedió.

Vamos a otra página de información empresarial, einforma, en la que muestra que es una empresa pequeña, con 85.800 euros de capital social:

Como podemos ver, no cotiza en Bolsa y tiene 14 empleados, así que efectivamente puede ser considerada una empresa pequeña.

Ahora bien, la empresa ha dicho que tiene "licencia para exportar", pero no ha aclarado si es algo que venía haciendo últimamente y, según la web einforma, cuyo enlace ya figura más arriba, resulta que "no constan actividades internacionales": 

Así que, o esa web no contiene información actualizada o la entidad mencionada no tiene experiencia en intermediación internacional, ya no digamos en intermediación con China.

Según la web farmaceútica ImFarmacias, con motivo de la nueva página web presentada en 2015 (que es la que ahora no funciona):

"Interpharma, S.A. es una empresa privada, de capital 100% nacional. Fundada en el año 1972 como Laboratorio Farmacéutico, Cosmético y Pediculicida, actualmente está homologada también como Laboratorio de Complementos Alimenticios y Vitamínicos. Interpharma posee en su portafolio medicamentos incluidos en el Sistema Nacional de Salud y todos sus productos (Medicamentos, Cosméticos, Pediculicidas, Complementos Vitamínicos y Alimenticios) son distribuidos por el conjunto del territorio nacional por medio del canal farmacia. El rigor farmacéutico que prevalece desde sus orígenes ha permitido a la compañía mantener la máxima garantía de calidad y seguridad de sus productos.

En otra página de información empresarial, infocif, aparece lo siguiente:

Esto es, se encuentra catalogada en el sector de "productos cosméticos o de cuidado personal". Porque obviamente los jabones y los multivitamínicos no pueden ser considerados "medicamentos" en sentido estricto.

En cuanto a sus directivos, es algo aún más surrealista:

Parece que todos pertenecen a una misma familia.

En cuanto a sus marcas, no hay ninguna que sea de productos medicamentos que podamos considerar como farmaceúticos puros:

Kife es un tratamiento contra piojos. Sincaspol es un producto para cuidado del cabello que no parece estar a la venta, al menos, online. Piritigen es un champú. Filbrun tampoco parece estar a la venta, pero por la descripción parece ser un jabón. Aspolvit es una línea de cuidado facial femenino. Talkinter es una línea de talco. Tiagen es una línea cosmética para cremas. Como se dice en su objeto social, se dedica a la parafarmacia, no a la farmacia como tal.

Para terminar, resulta que la empresa en cuestión, en todo 2018, tuvo una cifra total de negocio de 2,9 millones de euros. Algo muy interesante teniendo en cuenta que intermedió una operación de 17 millones de euros.

Además de disparatado, lo veo totalmente surrealista. La empresa dice que ha devuelto el dinero. A mí me interesaría saber por qué se terminó aceptando su intermediación y no la de otros con experiencia en China. ¿Es por eso por lo que se confundieron de tests (lo puse ya en este comentario?

"Los llamados test rápidos adquiridos por el Gobierno detectan el antígeno viral, es decir, pequeñas partes del virus que se encuentran en las fosas nasales del paciente. Se introduce un pequeño bastoncillo por la nariz y unos 15 minutos más tarde, 'voilà'. El problema es que lo que se gana en rapidez se pierde en sensibilidad. Estos test suelen tener una especificidad muy alta, es decir, saben perfectamente cuando alguien no está enfermo, pero una sensibilidad mediocre: solo detectan a los enfermos de Covid-19 menos de la mitad de las veces.".

PS: Obviamente quien sepa algo más de la empresa o quien me pruebe que algo de lo que está puesto aquí es incorrecto, me lo dice y completo la información o la modifico.